(Capitán Nombrete Con Fred Frith)
Yo soy infinito. Unfunuto. Asfenato. Tontiloco. Turururu. Yo soy. Y vivo viviendo vivencias vívidas. Estoy vacío por dentro y blanco por fuera, ¿qué soy? Soy una mosca metida de lleno en una gran bosta de vaca. Deliciosa mierda ¡mmmm! ¡bzzz!¡bzzz! Tengo el corazón lleno de sangre que borbotea, ¡plumb!, ¡plumb!, ¡plof! Un tomate reventado. Caigo, caigo, caigo, caigo. Hacia el centro de la nada, caigo. Como un apagón. ------. Vamos a robar televisores. A comernos todos los víveres de los escaparates. A violar monjas y a desenterrar cadáveres. "Estamos todos en esto, muchachos, todos estamos en esto". Esto en muchachos estamos todos. En muchachos esto todos estamos. Baja la guardia guardián. Camina plácidamente. Sucumbe ante lo abominable. Resérvate unos instantes. Salve a la niña que salta a la comba. “comb your hair, mrs.”. Salgo a la calle a merendar. Me tomo un sándwich de zanahoria. Hago ejercicios gimnásticos canónicamente marcados por tiempos precisos. Sudo. Dudo de mi alfombra mágica. Y, sin embargo, mírame. Soy como siempre. Nadie me ve porque soy un soplo de ahire. Un foco de ahire. Ahire. Majahire. Ya no sé qué pensar. Ya no sé si pienso, siquiera. Estoy al borde del pensamiento, espera, espera…, no, se me ha escapado otra vez. Globo, globito, globuelo. No me da nada. No me pide nada. No me acompaña. No me perturba. No me indigesta. No me absorbe por su pajita de cartón. Debo esperar todo el tiempo que se precise. Estoy aquí, escuchándoos respirar. Soy el ojo que os mira todo el tiempo en todas partes. Soy la censura de vuestra sombra. Soy la camarera gitana que no sabe servir la sopa. Soy la letra ‘e’.