lunes, 8 de febrero de 2016

No sería extraño



¿Y el día que alguien me diga que tú has muerto?
Nah. No hay nadie en común que pueda hacerlo.
Tus amigos nunca fueron mis amigos.
Y mis amigos apenas te conocieron por mí.
O que alguien te diga a ti que el muerto fui yo
–que tanto te insistí en que moriría,
que lo mismo ya me creías difunto hace mucho tiempo–.
No, insisto. Ninguno sabremos por nadie
que al fin la vida le cobró al otro su deuda.
Para el caso, igual podríamos morir el mismo día,
hora, minuto, segundo. Tal vez nuestros espíritus
se crucen en el tránsito y no se reconozcan.
No sería extraño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario