De Otras Noticias
…el placer ha estado menos presente que la necesidad de
sentir otro cuerpo contra mi piel.
Hay regiones en donde el hombre cava en su felicidad las
breves bóvedas de un descontento sin razón y sin sosiego.
Saber que nadie escucha a nadie. Nadie sabe nada de nadie.
Que la palabra, ya, en sí, es un engaño, una trampa que encubre, disfraza y
sepulta el precario edificio de nuestros sueños y verdades, todos señalados por
el signo de lo incomunicable.
De Ilona llegó con la lluvia
Siempre daba la impresión de que su exclusivo y absorbente
propósito era enriquecer el presente con todo lo que se iba presentando en el
camino.
Llevaba impresa en algún lugar de su ser ese signo que
distingue a los vencidos y que acaba aislándolos irremediablemente de sus
semejantes.
Lo malo de las crisis es que minan la confianza en el azar,
esa fe en lo inesperado que es condición indispensable para encontrar la
salida. Deja que pasen las cosas, ellas traen escondidas la clave. Si se busca,
se pierde la facultad de descubrirla.
La solidaridad imbatible de quienes no quieren el mundo como
se les da sino como ellos se proponen acomodarlo.
…la plenitud de nuestra insensata condición de irredentos
soñadores, luchando a brazo partido con lo que llamamos Realidad y que nunca
acabamos de saber muy bien en qué consiste.
¿La felicida es un engaño con propósito enriquecer el presente?
ResponderEliminar¿Un mensaje cifrado a la vista de cualquiera? ¿Una queja enmascarada como idea?
No sé.
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