domingo, 24 de julio de 2011

El amor de Circe

¡Oh! Circe.
¡Cuánto me amabas!
Con un amor arrebatado,
inconsecuente.
Extremadamente inocente,
a pesar de Diosa.
¿Me preguntas por qué te abandoné,
cuando me hacías todos los caprichos?
Te responderé brevemente:
Demasiada carne fiesta
para tan pocos amigos.


3 comentarios:

  1. El anterior poema me gustó, pero este me lleva un escalón más alto que la simple complacencia. Su final es genial, nunca he visto mejor explicado lo que hacía Circe con los naufragos, la mala baba de esas dos últimas frases no pueden ser menos que arte.

    ¿Tengo yo algo que ver con esa mención a la carne fiesta? Si así fuese me sentiría enormemente halagado.

    ResponderEliminar
  2. El autor conoce a su público y sabe cómo halagarle. La verdad es que yo también pienso que me ha salido un poema genial.

    ResponderEliminar
  3. No tenía suficiente conocimiento de literatura clásica para apreciar el magnífico texto. Además hay que saber de cocina tradicional canaria para poder captar esas dos líneas finales. Estupendo¡¡

    ResponderEliminar