lunes, 26 de julio de 2010

画龙点睛

(Huà lóng diǎn jīng)
Al dragón dibujado [añadirle] un punto como ojo.
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“vivió tan rápido que dejó su futuro detrás”
No me gusta esta moda de las frases cortas e impactantes. Frases que contienen una enseñanza esencial o un simple juego de palabras. Muy al estilo oriental. Precisamente el mérito de ese tipo de frases es su inconveniente. Se trata de su concisión en el mensaje, su precisión en la expresión y su encanto, que en mi ejemplo está en la paradoja. Al final la forma termina por dominar el fondo y se convierten en frases vacías, que todo el mundo pronuncia cien veces al día, pero que muy pocos reflexionan en profundidad.
Pasa mucho en instituciones, que terminan por configurar una retórica que domina todos los discursos, que llena cualquier alocución, tanto de un orador ante un auditorio como en una reunión más íntima, de frases hechas que ya han perdido significado, como esqueletos de insectos vacíos.
Un día vimos en chino un par de frases hechas que se han convertido en expresiones de uso común con un significado adjetival preciso: “dibujarle un ojo al dragón” fue una de ellas. El ojo del dragón es un detalle: una frase, una palabra, que le presta a ese texto un toque especial: es nuestra “guinda” en el pastel. Para eso sirve una frase acertada, para completar una reflexión dibujándole un ojo al dragón. Si no hay dragón, el ojo es sólo un punto en el aire.

3 comentarios:

  1. A veces, una frase hecha es perfecta en determinadas situaciones ayudándonos a expresar aquello que queremos decir. Sin embargo, estoy de acuerdo que, otras veces, son usadas y manipuladas sin tan siquiera saber de dónde vienen y sin parar a reflexionar en su sentido.
    Ésta que muestras "añadir el ojo al dragón" yo na la conocía.

    Te dejo un pequeño fragmento del Tao-Te-King de Lao-Tzú:
    "Los antiguos decían lo incompleto será lo completado, lo curvo será enderezado, lo hueco será llenado, lo usado será renovado; la simplicidad hace tener éxito, la multiplicidad perturba.
    ¿Acaso no están los axiomas de los antiguos, citados más arriba, llenos de sentido? Sí, hacia lo perfecto (que no hace nada para atraer), todo afluye espontáneamente".

    (PD: Terminé Firmin; está lleno de descripciones e ironías humanas desde el punto de vista de un ratón con un lenguaje sencillo que engancha. Por momentos confundes quién está narrando la historia, pero creo que le falta un pelín de profundidad -en mi modesta opinión-.Me cuesta decidir si recomendar este libro o no).

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  2. "desde el punto de vista de un ratón"

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  3. El tipo del que hablaba Ricardo y que le podía dejar Firmin soy yo. Yo no lo recomendaría. No recuerdo bien pero al leer a Lunática estoy de acuerdo en que le falta profundidad. Es americano en el mal sentido. También sucedió que me lo recomendaron con tanto énfasis que luego me decepcionó. Se deja leer pero yo soy partidario de otro tipo de literatura.

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