Después de leer lo poco que he leído sobre la guerra civil
española, que muchos actualmente recuerdan con un gesto reivindicativo no solo contra
el actual gobierno y sus prácticas siniestras sino contra el común de los
españoles que siguen viviendo como dios buenamente les da a entender como han
hecho durante siglos, procurando no joder demasiado a nadie si no es
obligatorio y el resto del tiempo ocupándose de lo suyo que, aunque muchos no
lo comprendan así, otros sí que lo han entendido, es lo de todos, pues mis
conclusiones son y siguen siendo hoy que la guerra civil no la ganaron los
fascistas sino que la perdieron los antifascistas y que la única razón fue que
pese a que los antifascistas tenía un claro objetivo que era evitar que llegaran
a poder los fascistas, eran muchos y muy variopintos y se la pasaron gastándose
la mitad del esfuerzo que tenían que haber empleado en eso que era tan claro y
tan simple como pelear contra los fascistas, peleando unos contra otros y
discutiendo acerca de qué y cómo serían las cosas cuando les ganaran a los
fascistas y acusándose unos a otros de lo flojos que eran en la auténtica lucha
contra el fascismo y cada uno creyéndose ejemplo glorioso de lucha heroica
contra ese demonio que, mientras, podía haberse limitado a quedarse sentado y
esperar que estos valerosos muchachos defensores de la libertad de los pueblos
se matasen entre ellos, pero tampoco eran tan listos y además estaban henchidos
de ardor guerrero y toda esa mierda que luego les metieron por el culo al resto
de los españoles hasta que acabamos todos creyendo que al fin y al cabo tampoco
fue tan malo, que porque no nos dejaran leer cuatro libros que de todas maneras
no íbamos a leer no podía ir exagerándose con lo de la falta de libertad etc.
Pues bien, nada ha cambiado, me parece a mí.
Un texto que resume en una sola frase, sin un solo punto, la esencia del tema. Lo poco que sé de la guerra (y de lo que no me fío demasiado porque anda que cuesta encontrar textos no muy alineados) confirma la desunión entre el bando que no era el franquista, que es la mejor manera de referirse a ellos, a la vista de la mezcla que fue.
ResponderEliminarPor otro lado, hay quien hoy sigue defendiendo que la izquierda es el "ejército de Panchovilla" y que así le va frente a una derecha de una sola pieza. También es que les va en la naturaleza. Los de derechas, por lo general, tienen una psicología autoritaria, piramidal: los de abajo obedecen a los de arriba, y ordenan a los de más abajo. Sin planteamientos, porque el mundo es así, y eso facilita mucho su organización monolítica.
Por otro lado, mira lo que la mayoría ha hecho con su libertad, ponerse a ver cuatro horas diarias de televisión. Un pueblo que sigue gritando aquello de "vivan las caenas", la mayoría vitoreando a lo reyes cuando pasan y diciendo de Barcenas "¡joer, qué tío!". Ninguno de la enorme masa que necesitamos para cambiar esto leerá este comentario, ni tu blog, ni ningún libro, ni nada. Quizá el Marca.
Pues no siendo yo un experto en el tema y no habiendo leído, posiblemente, mucho más de la gloriosa cruzada que tu, pienso que tal vez algo tuvo que ver en la derrota de la república el embargo, en aras de mantener la neutralidad, que impusieron los países democráticos europeos a la venta de armas a la república, y la total falta de respeto a ese embargo de las potencias facistas europeas al suministrar tropas y pertrechos a los sublevados.
ResponderEliminarTodo dicho en una sóla frase como el texto se merece.
Sí, eso también.
ResponderEliminarHombre, yo no toco el tema de las causas de la derrota, o de los apoyos externos, sino que sí que parece probado que el lado "republicano" (comunistas, anarquistas, republicanos...) estaba bastante desunido. Opino, sin acritud.
ResponderEliminarEn cuanto a lo de que los de derecha son más autoritarios, me lo estoy pensando. Acabo de recordar a Stalin.
Sin que sirva de precedente, yo iba a decir lo mismo que Calamardo. Los republicanos no recibieron el apoyo exterior que recibieron los nacionales. Además de las oposiciones internas, que evidentemente sangraron gran parte del esfuerzo que, como tú señalas, debían haber dedicado a crear un bloque más monolítico contra los fascistas.
ResponderEliminarPara ejemplificar eso que acabo de decir, hay una película de Kent Loach que seguro todos conocen: "Tierra y libertad". Si no la conocen, merecería la pena incluirla en nuestro cine-fórum, porque es la mejor que he visto sobre la Guerra Civil, con el estilo descarnado, hiperrealista, sobrio, del director británico. Imprescindible. Salvando las diferencias obvias, esa película es a la Guerra Civil española lo que "La lista de Schlindler" (¿se escribe así?) es a la Segunda Guerra Mundial.