lunes, 19 de noviembre de 2007

Un hombre feliz, pero tonto

He leído mucho, pero no he aprendido en la misma medida. Se me revela entonces la lectura como un acto menos relevante de lo que me envanezco en considerar como defensa de mi compulsividad. Quisiera haber adquirido la sabiduría de todos esos libros más que nada para emplearla en la vida, o tal vez en la simple interpretación de esta vida que llevo; porque, al final, no es lo que hacemos sino lo que pensamos de ello lo que importa. De esto se revela, evidentemente, que lo que pienso de mi vida es que no es todo lo plena que podía haber sido si hubiera sabido más. Como Sabines en algún poema, a veces me gustaría dejarle mi vida a otro que la supiera llevar con más dignidad que yo. Me compadezco de ese pobre otro que por culpa de mi intrusión, no está llevando, mejor que yo, esta vida que yo llevo a medias, imprecisa, indecisa, incompleta. Y me compadezco de mí que no puedo soñar con llevar una vida mejor, puesto que ya la llevo y no he sabido aprovecharla.

4 comentarios:

  1. No importa, quedate tranquilo nadie se ha dado cuenta , tu disimula cuando te pregunten, si te sientes muy mal te queda otra: miente, inventate todo, a veces funciona bastante. Tambien funciona pensar en positivo todo el mundo tiene una vida plena y tu mediocre: toma yaaaaa!!!!! eres diferente. Ves? y tu que estabas triste... ay ay ay...


    julia

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  2. anónimo julia, gracias por tus sabios consejos. La próxima vez tráete un martillo. Puede que sea más efectivo (y puede que no menos afectivo)

    "por el sueño julia" (jose agustín goytisolo)

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  3. ánimo julia, Grecia por tus labios, conejos.

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  4. Riforfo Rex: mi vida y las vidas de los que conozco son sustancialmente una mierda, soñar con otras es un buen ejercicio, pero insisto haz como yo miente y di que todo va bien. En serio crees que alguien podria hacerlo mejor que nosotros? Besitos de tregua

    Julia

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